En un bar, vi a un rubio atractivo, bien arreglado que me sonrío y pensé: -Está noche seguro que duermo con él, es evidente que me está provocando ¿Tendré derecho a entrar en su intimidad y hacer de las mías…? si no ¿para qué me coquetea?
También sucedió que un día que andaba espléndida, invité a cenar al moreno, el aceptó. Ya, en otras ocasiones, habíamos convivido. Pensé -Ya está armado, seguro que me lo llevo.
Pero ¿qué creen? se puso de apretado y nada sucedió, incluso el muy tarado me escribió para agradecer. No le contesté, ¿qué se piensa?; me fui con mi grupo de amigas a otro antro y ahí un hombre de buen ver, solo, así que ataqué de inmediato, deduje: -Viene solo, es seguro que viene a ligar. Es claro que “quiere pelea”.
Para mi suerte, tengo un chavillo que trabaja para mí y siempre es muy sonriente y amable, o sea… lo traigo muerto, así que con el pretexto de algo de trabajo, le dije: -Tienes que venir a mi casa. Por supuesto que pienso darle unas copas en cuanto llegue y cederá a mis deseos, faltaba más, sólo para eso sirve el muy tontito.
Es como en mi relación anterior, caramba con el bruto que andaba, siempre tenía que andarlo corrigiendo y el muy canijo luego se la pasaba de coqueto o hablando con otras mujeres que disque sus amigas… No lo bajaba de… bueno la palabra de cuatro letras, que debería ser igual en hombres que en mujeres ¿no es verdad?
Y qué les cuento… en el trabajo, el jefe anda de un humor, se ve que su vieja no lo atiende: amargado; y todavía su secretario anda muy payasito, seguro que está en sus días donde le duelen sus partes nobles, ojalá alguien los atienda “par de malcos” (mal cogidos), ojalá alguien les haga el favorcito”.
Pero hoy me divertí muchísimo, pasé por la calle y vi dos o tres papacitos caminando y les solté mis mejores frases:
- “En esa cola, sí me formo”
- “Con esas tortas y un refresco… eso y más merezco”
- “Te voy a dar hasta quedarme seca”
- “Quisiera ser frijol, para embarrarme en tu tlacoyo.”
- “Paaacito chupo, mamo, ensarto, reviro, rebabeo, coso, descoso, estrujo, lavo, plancho y cuido niños a domicilio”
¿Les suena hombres? ¿Les suena mujeres?
Esta sería una realidad de igualdad de género ¿no les parece? Eso no quiere decir que piense que es correcto, no, sé que las mujeres pensantes no queremos llegar a esto. Pero la igualdad es mucho más profunda y de acciones, que lo que se dice, la igualdad sólo puede venir del respeto a la persona, al ser humano. Algunos hombres, muchos, piensan y actúan así, ¿qué se siente leer estas anécdotas y pensar que te sucediera, qué te trataran de esta manera? Esto nos pasa todo el tiempo a las mujeres en sociedades machistas donde creen que tienen el derecho de faltarnos al respeto constantemente. Ojalá pudieran pensar un poco y darse cuenta que decir que apoyan en la igualdad, no es suficiente, hay que actuar como gente y no como salvajes.
Gracias, pero no necesitamos sus aplausos por nuestros logros, lo que necesitamos es que día a día, en las cuestiones más sencillas tomen conciencia que la mujer es otro ser humano que existe para sí misma y no para ustedes; y mujeres por favor, ayúdenos dándose a respetar un poco para no permitir que la bola de patanes se salga con la suya en este tipo de ocasiones. Eso, es lo que conduce a actos mucho más graves como violaciones o abusos físicos y mentales… Todo tiene un origen, el origen sólo está en las ideas y concepciones del mundo ¿será posible que un día cambiemos y entendamos la igualdad? Mi parte ángel está segura que sí.
Martha G. Olaiz Fernández, inicia su carrera literaria a los 11 años, escribiendo poemas, insipirada en los libros de Antonio Machado de la librería familiar.
Su pasión siempre ha sido la misma, y su primera publicación aparece en el periódico Universal Gráfico, en la sección del Niño Universal a principios de los 90´s, como parte de un servicio social.
Después de incursionar en el mundo de la publicidad algunos años, donde logra un “Heraldo” por el comercial televisivo “Teatro”; pasa a las puertas de Televisa y, durante 27 años, escribe guiones para dicha empresa entre los que destacan telenovelas como “Atrevete a Soñar”, alias Patito Feo; “Piel de Otoño”, Maria Belén” y “De pocas, pocas pulgas”.
Publica su primera novela “Tierra Sinombre” en el año 2004. Su última publicación en 2018 es “Robarte un suspiro”, editado en Amazon.