“El que pretende pasar por sabio entre los necios, pasa por necio entre los sabios” Quintiliano
Lo último que recuerdo es que aun estábamos festejando que hace un año, por fin, terminamos con el mal gobierno y la corrupción; que triunfó el bien por encima de la mafia del poder. Pero ahora, no sé en dónde estoy, ¿qué es este lugar inhóspito? Solo veo una cantina. Entraré para tratar de recordar qué pasó y qué hago aquí.
Pido un tequila y el cantinero no sabe de lo que le hablo, pero me sirve un whisky. En la mesa a mi lado están dos personas platicando sobre el gobernante de México. Ambos parecen extranjeros por su tono de voz y por su absoluta ignorancia de lo que dicen acerca de mi presidente. No puedo ni debo permitir tales afirmaciones. Interrumpiré su plática.
Buenos Días señores, soy Toño
Con mirada y frente fruncida, más de a fuerzas que de ganas me dice uno de ellos.
- Arturo Schopenhauer
Más amable pero también extrañado, el segundo responde con la mano tendida.
- Nicolás Bernardo Maquiavelo, uno piacere
Veo que hablan de mi presidente con tanta ligereza y sin conocimiento real de lo que es la política mexicana, creo que ambos se equivocan, pero es entendible, ambos son extranjeros, no conocen la realidad del país ni lo que hemos sufrido desde la conquista española y hasta nuestros días.
- (Maquiavelo) Arrime una silla, siéntese e ilústrenos joven
Tomo una silla y me siento, el otro viejo cascarrabias me mira con poco agrado y se limita a decir
- (Schopenhauer) Lo interesante de saber de política es que podemos darnos el lujo de escoger, minuciosa y cautelosamente, a los interlocutores con los que queremos conversar en serio.
- (Maquiavelo) Mira yo sentencié qué hay dos verdades; la verdad moral y la verdad política. La primera es como debería ser y la segunda como es. ¿Quieres que te endulcemos el oído o quieres realidades Toño?
Vayamos por partes, mi presidente busca lo mejor para su pueblo, el confía plenamente en la bondad y la sabiduría del pueblo, hay quienes con sus comentarios intentan destruir sus modestos esfuerzos, que se notaran constantemente.
- (Schopenhauer) Lo curioso de su país es que busca en el cielo lo que tiene en su espejo, buscan mesías, vengadores de lo que son incapaces de hacer. ¡Mediocres!
- (Maquiavelo) Simplemente los tiranos sacrifican los derechos de los demás por sus intereses, cuando Bruto viola la constitución de Roma funda a puñaladas la República, creo que su gobernante desea imponer su voluntad separando más al pueblo, siendo él quien debería de provocar la unidad. Sin embargo, su acción responde a su principal objetivo, hacerse de más adeptos, por ello las dádivas son su eje primordial.
Hay quien se resiste a terminar con la corrupción, y vale la pena el sacrificio.
- (Schopenhauer) Ahora resulta que ¿tu deidad es la contraseña de todos los moralistas carentes de juicio e ideas?
- (Maquiavelo) Mire joven, asígnele un lugar al interés, con eso podremos justificar las diversas necesidades políticas, el secreto que guarda el déspota es debilitar el espíritu público; censurar, atacar a los detractores, señalarlos como anti revolucionarios y ponerlos en la Cruz.
Mi presidente sólo quiere que haya justicia y bienestar para su pueblo.
- (Schopenhauer) A ver muchachito, usted tiene fe, yo poseo aproximación a la verdad. Cuando la fe y la verdad chocan, la primera se resquebraja, por ello tiene miedo de encontrar la verdad, porque su fe se vería mermada, prefiere seguir haciéndose el tonto a reconocer que se equivocó.
- (Maquiavelo) Considero que a usted le interesan más las apariencias, es un mitófago consumado.
- (Schopenhauer) Ya lo dije en una de mis lecturas, hay personas como vos que hablo con ellas y me imagino al niño que habla con su muñeco: el niño sabe que el muñeco no lo comprende, pero a través de su consciente y agradable autoengaño obtiene la alegría de comunicarse con alguien, ustedes son similares. Su autoengaño los hace felices. Ese es su problema.
Pero al final demostraremos que tenemos razón y la gente saldrá del agujero en el que los anteriores gobiernos nos metieron y que impiden nuestro crecimiento.
- (Schopenhauer) Ratifico que oír cantar a una persona ronca o ver bailar a un tullido es penoso; pero presenciar como argumenta una mente estrecha es insoportable. Su argumento sobre su ídolo no aporta un valor nutritivo al debate. Tal parece que Nicolás y yo nos tomamos los vinos y a usted le hacen efecto. O ¿tu qué crees mi ilustre cofrade?
- (Maquiavelo) Lo malo es que el gobernante que adora el joven cree que los instrumentos de sus ideas deben convertirse en instrumentos del poder.
- (Schopenhauer) Costumbre tan vulgar como poco educada. Escasez de ideas de aquel sujeto de poco tino pero gran charlatán. El núcleo de su retórica está basado en absurdas ocurrencias tomadas al vuelo. Privado tanto de fundamentos como de resultados. Engendrando mentes estrechas como la vuestra.
Pues ya les di mis argumentos, y parece que ustedes no los quieren entender, ignoran lo que les digo porque no les conviene la verdad, seguro ustedes se vieron beneficiados por los corruptos de antes, son del PRIAN.
- (Schopenhauer) ¿Argumentos?, oigo el tableteo del molino, pero no veo la harina por ninguna parte. Bien dijo Talleyrand que “el hombre ha recibido el lenguaje para poder ocultar sus pensamientos”. ¿Qué pasará por la mente de ese tabasqueño? Todo comentario se reduce a baratijas verbales vendidas como ideas filosóficas que exhiben la manipulación de la son objeto mentes vacías.
- (Maquiavelo) Todos los Estados bien gobernados y todos los príncipes inteligentes han tenido cuidado de no reducir la nobleza a la desesperación, ni al pueblo al descontento. Aquí parece que ni gobierno ni inteligencia.
El pueblo sabe que el pasado fue desastroso, debe de partir que se dejó un país devastado y que llevará tiempo enderezar la nave.
- (Schopenhauer) No no y no, Exigir que un individuo recuerde todo lo que ha sucedido en la historia es como pedir que todavía lleve dentro de sí todo lo que ha comido.
- (Maquiavelo) En general, los hombres juzgan más por los ojos que por la inteligencia, pues todos pueden ver, pero pocos comprenden lo que ven.
¿Por qué no dijeron nada cuando estaban los prianistas saqueando a la nación? Ustedes son parte del sistema anti gobierno, como ya no les pagan por eso hablan mal del presidente. Solo sirven para el chisme, el rumor y la calumnia. Ese es su problema.
- (Schopenhauer) Pareciera que tu ídolo hoy en día recurre al oscurantismo que desea apagar la luz de la verdad para poder robar la libertad de ideas, en eso radica la libre expresión y no todo lo que dice el monarca debe de ser visto como la verdad absoluta, es falaz asumir que quien es contrario a esa verdad es un perverso enemigo del sistema.
Claro, se sienten aludidos cuando se dice que se acabará con la corrupción.
- (Maquiavelo) Los hombres van de una ambición a otra: primero, buscan asegurarse contra el ataque y luego, atacan a otros. La promesa dada fue una necesidad del pasado; la palabra rota es una necesidad del presente. Por ello tu gobernante ya no encuentra la puerta.
No, mi Presidente fue muy congruente y renunció a los lujos, a la seguridad y a los asesores, no los necesita y por ello dice lo que siente. Para millones de mexicanos Amlo es un buen presidente. Todos los que perdieron sus privilegios lo critican para hacerlo quedar mal.
- (Maquiavelo) Un príncipe que no es sabio no puede ser bien aconsejado y, por ende, no puede gobernar
- (Schopenhauer) Los fanatismos, como las luciérnagas, necesitan de la oscuridad para brillar. Sólo en un pueblo así, prevalecen gobernantes así.
- (Maquiavelo) Concluiré con usted diciendo que “El que engaña encontrará siempre quien se deja engañar”.
El tiempo nos dará la razón y ustedes verán lo equivocados que estaban caballeros. Paso a retirarme.
Me salgo indignado y furioso de ese lugar, luego de tratar de hacer entrar en razón a dos personas tan cerradas y contrarias a la voluntad popular. Se creen conocedores. El verdadero sabio es Amlo y el pueblo que lo eligió. ¿Qué seguidores pueden tener esos tipos?