A pesar de que mi viaje por Oaxaca fue en modo relámpago, pude degustar de unas deliciosas costillas en adobo, unos chiles de agua rellenos de carne, unas deliciosas memelas, botanear con chicharrón y pedazos de quesillo para acompañar unos buenos mezcales y, sobre todo, tuve la fortuna de conocer a varias personas extraordinarias que, desde sus trincheras, están desarrollado proyectos en favor de las distintas comunidades indígenas de ese bello estado.
Hoy les platicaré sobre lo que sucede en Magdalena Teitipac, municipio perteneciente al distrito de Tlacolula y que en náhuatl significa “El Lugar sobre las Piedras”, donde Rosario Martínez, una mujer con una sonrisa cautivadora y con un peculiar don de docencia, imparte cursos y talleres de educación temprana a bebés y a niños de hasta 6 años de edad, respaldada por la organización civil ChildFund México.
“Con estos cursos ayudamos a los niños recién nacidos en lo que es la parte de coordinación, de lenguaje y motricidad, y a través de ejercicios los estimulamos de manera temprana. Hacemos una demostración para que las mamás lo hagan en sus casas y los niños vayan desarrollándose mejor”, nos cuenta orgullosa esta educadora oaxaqueña.
Ross, como le dicen de cariño sus alumnos, tiene a su cargo a 10 pequeños con quienes entabla comunicación bilingüe, es decir, en español, pero, sobre todo, en zapoteco, su lengua materna para hacer que estos pequeños puedan expresarse sin inhibiciones y se dé un real intercambio de conocimiento, experiencias y vivencias.
En Magdalena Teitipac hay 4 facilitadores más de ChildFund México que imparten talleres a niños que ya cursan primaria y secundaria, con los que trabajan para que entiendan y atiendan la responsabilidad de cuidar su entorno, realizando acciones para detener el cambio climático como sembrando árboles y creando huertos familiares y, sobre todo, de hacerlos que cuiden de su cuerpo y su mente para evitar ser presas de la violencia y las drogas.
La oriunda de San Juan Guelavia, Tlacolula, poblado cercano a Magdalena Teitipac, se ha desempeñado durante 12 años como promotora de educación a nivel no escolarizado, dependiente del Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO), tiene ahora, junto con los padres de familia, el reto de seguir bailando, cantando y jugando con ellos, pero a distancia debido al confinamiento por la emergencia sanitaria, al menos por unos meses más.
“Ha sido difícil ver el avance de los niños en estos meses de confinamiento. No es lo mismo estar con ellos. Para abril pensabamos hacer muchas actividades por el Día del Niño, pero no fue posible, aun así, hice un anuncio en la comunidad para felicitarles y ponerles canciones infantiles; eso los animó mucho, pero siempre es importante el contacto, la presencia”, expresó Ross con cierta nostalgia.
Y vaya que será un todo un reto, porque a pesar de que Magdalena Teitipac se localiza a hora y media del centro de Oaxaca, es una comunidad con un alto índice de marginación y, muchas familias no cuentan con teléfonos inteligentes para mantener comunicación constante con Ross, pues regularmente sólo son usados para casos de emergencia.
Aunque el panorama es adverso, la buena noticia es que Ross, seguirá haciendo que los niños de Magdalena Teitipac imaginen ser los protagonistas y estar en esos lugares que les describe al leerles un cuento, y seguirá poniendo las primeras piedras para que vayan eligiendo qué quieren “ser de grandes”. Para ello, en coordinación con directivos de la fundación y los padres de familia, está en pleno análisis para definir nuevas estrategias y seguirles apoyando hasta convertirles en auténticos agentes de cambio para sus pueblos y comunidades.
La maravillosa labor de Ross es respaldada por buenas acciones como el “apadrinamiento solidario” a niños de Magdalena Teitipac que, por medio de aportaciones económicas a ChildFund, les han permitido seguir con su educación y cubrir sus necesidades alimentarias. Por cierto, si deseas adoptar un “ahijado” consulta la página Apadrina a un niño y transforma su vida | ChildFund México.
https://www.childfundmexico.org.mx/apadrina/
La pasión de Rosario Martínez no sólo se vive en los muros de las aulas, sino también se da en el arte de comunicar, por ello su participación en un programa de radio digital en el centro de Oaxaca. Además, está por traducir y darle voz en zapoteco al “Canto por la Paz”, canción de origen brasileño.
Por último, comentarles que las mujeres de Magdalena Teitipac son las creadoras de uno de los platillos más representativos de Oaxaca y de México: las tlayudas. Gracias a su destreza para “tortear” la masa han hecho que esa gran tortilla acompañada con frijoles, tasajo, chorizo oaxaqueño, quesillo, nopales y una salsa bien picosa, más de uno salive y uno que otro llore de felicidad al degustarla. Y que, justamente durante mi visita, fue reconocida como el mejor platillo callejero de Latinoamérica.
De manteles largos
El pasado 6 de agosto “Sí a las Buenas Noticias” cumplió 18 años de buscar y encontrar el lado positivo de la vida y de las noticias. Las buenas noticias más que consolidarse como un proyecto laboral se ha convertido en una forma de vida. Gracias por permitirnos compartirlas con ustedes. Agradecida siempre.