“No hay nada más difícil de emprender,
ni más dudoso de hacer triunfar,
ni más peligroso de administrar
que la elaboración de un nuevo orden”.
Nicolás Maquiavelo
Acreedora de varios apodos, Elba Esther Gordillo, mejor conocida como “La Maestra” -aunque desde 1973 no pisa un salón de clases-, perdió el piso al inicio del sexenio de Enrique Peña Nieto. Tras 23 años como líder del Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Educación (SNTE) pero, particularmente, durante los dos sexenios de la mal llamada “transición democrática”, tuvo un brutal crecimiento en influencia y recursos. Como nunca antes, Fox y Calderón la dotaron de un gran poder, y desde esa nube decidió enfrentar al nuevo presidente con el que el Partido Revolucionario Institucional regresaba a Los Pinos.
Con varios funcionarios aliados de primer nivel en la nueva Administración, incluyendo al joven Enrique Peña Nieto, a la lideresa sindical le pareció fácil oponerse públicamente a la principal política anunciada: la Reforma Educativa que, por cierto, no era otra cosa que una reforma administrativa.
El 20 de diciembre del 2012 dijo en el marco del XXXV Consejo Nacional del SNTE: “Si hay algún delito o algo qué cuestionarme, aquí estoy yo. Si soy yo la que estorba hagan de mí lo que quieran, pero contra los maestros no, definitivamente no, y los únicos que van a decir si me voy o me quedo son los del Consejo y el SNTE…… No más difamaciones del gremio, no más falsos debates, lo que es del César, es del César, lo que es del gobierno es del gobierno, y lo que es del SNTE es del SNTE….No estamos en venta, estamos en pie de lucha por las demandas del magisterio….No es coercionando ni amenazando como se van a tener mejores resultados”.
Y pasó lo que a todo líder, jefe, cabeza, que se enfrenta abiertamente al Estado, a la mano que le da de comer. Justo dos meses después de esas declaraciones, el 26 de febrero del 2013, fue arrestada en el aeropuerto de Toluca, tras una denuncia interpuesta ante la Procuraduría General de la República (PGR) por la Unidad de Inteligencia de la Secretaría de Hacienda, bajo la acusación de desvío de dos mil 600 millones de pesos de recursos del magisterio para su uso personal; más tarde fue acusada por el delito de defraudación fiscal, por el cual fue exonerada, pero permaneció detenida por los delitos de lavado de dinero y delincuencia organizada.
Cabe destacar que, exacto un día antes de ser aprehendida, dicha Reforma fue promulgada previa aprobación de los Congresos locales y del Congreso de la Unión. Acusaron de recibido el resto de los líderes magisteriales e incluso, los pertenecientes a otros gremios.
Ni cómo defenderla entonces, como es imposible también hacerlo ahora. Digna kardashian mexicana, mayor muy mayor, pero igualmente afecta a los lujos y a los excesos, a las cirugías estéticas y al desvergonzado y cínico derroche público. Aunque claro, a diferencia de aquellas, con una perversidad brillante y una soberbia descomunal, misma que la llevó a 5 años de encierro, alejada de la política y de los suyos.
Cómo olvidar cuando en 2008 regaló 59 Hummers -valuados en más de 500 mil pesos- a líderes del magisterio, o las cientos de fotografías y videos comprando bolsas y prendas de Luis Vuitton, Prada y Cavalli con costos muy superiores a lo que gana un maestro anualmente, y qué decir de las millonarias propiedades inmobiliarias y obras de arte que han salido a la luz pública.
“La Maestra” olvidó que “para tener la lengua larga, hay que tener la cola corta”.
Con todos esos lujos y excesos de conocimiento público, era evidente que Elba Esther Gordillo poseía recursos que no eran justificables con su sueldo de líder sindical, mucho menos, como nos ha querido convencer, producto de la herencia que le dejara su madre, otrora maestra rural de Chiapas.
Las coincidencias no existen, particularmente, no en política.
Inmediatamente tras su arresto, el SNTE la sustituyó por Juan Díaz de la Torre y el Sindicado, ya bajo su mando, recibió desde esa fecha y hasta ahora cerca de 3,130 millones de pesos, quedando claro, una vez más, que los líderes sindicales no son más que peones al servicio del gobierno federal. De ahí su poder, De ahí sus recursos.
El imperio de “La Maestra” era efímero, el verdadero jefe de los trabajadores de la educación siempre ha sido el gobierno quien ha usado, usa y seguirá usando políticamente al sindicato más grande de América Latina, y ahí es en donde Gordillo se equivocó al creerse invencible y enfrentarse abiertamente a Enrique Peña Nieto.
Pero también es cierta aquella frase que dice que “en política no hay enemigo muerto” y Gordillo nunca estuvo muerta. Peña lo sabe. Ahora AMLO lo sabe. Y ella también.
Estos cinco años en detención –casi siempre hospitalaria y domiciliaria-, si bien humillantes y trágicos (su hija más cercana murió de cáncer) no fueron, ni por luces, similares a los que padecen miles de presos, muchos inocentes, que esperan en las peores condiciones sentencias y juicios justos.
Astuta, maquiavélica, perversa, ambiciosa y hábil, tejió finamente nuevas alianzas con quienes, era evidente, suplirían a Peña. Ya desde muchos años antes contaba entre sus amigos a Esteban Moctezuma Barragán –próximo Secretario de Educación- y a Marcelo Ebrard Casaubón –siguiente Canciller de México-. Fueron tales los amarres políticos que, pese a su desprestigio, cercanísimos a la lideresa como su yerno, Fernando González; su nieto, René Fujiwara; y su hombre de confianza, Rafael Ochoa Guzmán, operaron abiertamente a favor de AMLO en las pasadas campañas electorales por la gubernatura del Estado de México en 2017 y por la Presidencia de la República en este 2018.
Puesta en libertad la noche del pasado 7 de agosto por el mismo gobierno que la mantuvo presa y bajo el argumento jurídico de errores procedimentales de la PGR. Gordillo ha vuelto, sabedora de que los tiempos y formas lo son todo.
Experta en show y drama, decidió reaparecer ante la opinión pública presentándose, a sí misma, como perseguida política el mismo día y a la misma hora que el presidente saliente y el presidente electo se reunían y daban una conferencia de prensa conjunta. Y no solo fue lo que hizo, sino lo que dijo: “Soy inocente…..Recuperé la libertad y la reforma educativa se derrumbó… Aquí tienen la imagen que ha predominado durante más de cinco años con respecto a mi persona y es producto de una persecución política, de acoso e injusticias. Es el producto de un expediente basado en mentiras y acusaciones falsas para hacerme ver culpable de algo que no cometí”
Pareciera que, con ello, daba no solo una señal contundente de regreso al poder al presidente que termina, sino también al entrante. Valiente nueva aliada que, difícilmente podrá volver a ser acallada por la vía de la cárcel. Y las herramientas que quedan para ello son pocas y, en una democracia regida por leyes e instituciones, nada correctas.
El principal activo de cualquier líder sindical es el de mantener la unidad del gremio, pero su retorno, genera todo menos eso. Ahora, la batalla por volver a hacerse del SNTE que, no es otra cosa que retomar el control de sus dineros y, con ello, de sus agremiados, buscará sin lugar a dudas, ser parte del encumbramiento del que supla a Andrés Manuel López Obrador en seis años. Y es visible, ya tiene dos gallos: Moctezuma y Ebrard.
Aún al final, en su último informe de gobierno, el Presidente Peña Nieto le dedicó algunas palabras con motivo de la Reforma Educativa: “Había un sistema discrecional, injusto e ineficiente que no reconocía el esfuerzo de los maestros, el clientelismo había sustituido al mérito…Era indispensable recuperar la rectoría del Estado en materia educativa……Las decisiones no fueron fáciles”.
Definitivamente nuestra Doña Macabra no suma en imagen o en prestigio, sino todo lo contrario, veremos de qué manera Andrés Manuel López Obrador sortea su relación con este personaje que es digno representante de todas las formas de hacer política que el electorado rechazó al votar masivamente por él.
Doña Macabra (personaje principal de una película mexicana de 1971 y que luego fue novela (con cambios en la trama) en 1972. “Cuenta la historia de una pareja venida a menos que piden con engaños asilo y ayuda a su anciana tía Armida, apodada Doña Macabra por su afinidad y gusto por lo tétrico. Se convierte en una búsqueda de un tesoro en todos los rincones de la macabra mansión en donde en cada esquina se esconden secretos y tal vez uno que otro muertito. Detrás de la ancianita dulce y bondadosa se esconde una mujer que no tiene un pelo de tonta ni permitirá que sus ambiciosos parientes se adueñen de lo que ella tanto protege”. (https://www.lavanguardia.com/cartelera/peliculas/dona-macabra-m-1157143)