“El arte de agradar es el arte de engañar”.
Marqués de Vauvenargues
Antes de iniciar las descafeinadas mañaneras, el presidente aún en los aposentos de Morfeo y mientras el resto de los mexicanos es víctima de los efectos del dios Baco padeciendo las borracheras de lo que no tomamos, un personaje se introduce en su sueño. Le habla con tanta familiaridad que parecieran conocerse de muchos años.
-Andrés ¿cómo estás? Qué gusto verte, he oído mucho de ti, mi jefe y yo tenemos ganar de platicar contigo.
Será en otra ocasión, ahorita voy a mi conferencia matutina, debo de hablar con la prensa porque ya voy a retomar mis giras, pero ok ok, tengo un pequeño espacio. ¿Con quién tengo el gusto?
-Soy Joseph Goebbels, fui ministro de propaganda de Alemania de 1933 a 1945
Mucho gusto señor gobels
-Goebbels!!, en fin, sabe, quiero darle unos consejos muy prácticos que yo implemente en aquella época y que me funcionaron de maravilla y veo que usted comienza a aplicar algunos. Mire, una vez que llegamos al gobierno, quede con las manos libres para monopolizar el aparato mediático estatal, prohibimos todas las publicaciones y medios de comunicación fuera de nuestro control, y orquestamos un sistema de consignas para ser transmitido mediante un poder centralizado del cine, la radio, el teatro, la literatura y la prensa. Veo que usted trae algo de eso en su cabecita.
Algo hay de eso, la derecha me ataca, comienza a generar dudas con mis seguidores y me insulta constantemente.
-Bueno camarada, usted digamos que fue muy contundente cuando no poseía el poder. Pero aquí estamos para ayudarlo, no para cuestionarlo. A mí me funcionó de maravilla “el principio de la transposición”, que no es otra cosa que, cargar sobre el adversario los propios errores o defectos, respondiendo el ataque con el ataque: “Si no puedes negar las malas noticias, inventa otras que las distraigan”.
Es lo que hacemos todos los días, mi palabra es “yo tengo otros datos” utilizo los distractores para evadir la realidad.
-Si camarada, pero le falta más ingenio, la gente comienza a cansarse de lo mismo. Por ejemplo, me gustó como utilizó mi “principio de la exageración y desfiguración” convirtiendo cualquier anécdota, por pequeña que sea, en amenaza grave. Lo del golpe de Estado fue una genialidad.
Es que con la mafia del poder ya no se sabe
-Es paranoia, pero sígala usando a su favor. Use el “principio de orquestación”: “la propaganda debe limitarse a un número pequeño de ideas y repetirlas incansablemente, presentadas una y otra vez desde diferentes perspectivas, Sin fisuras ni dudas”. De aquí viene también la famosa frase: “si una mentira se repite suficientemente, acaba por convertirse en verdad”. Usted no se salga del guión, siga repitiendo las consignas contra la derecha, el neoliberalismo, los fifís, la mafia del poder, la oposición, los adversarios.
Entonces ¿está bien lo que hago??
-Si el fin es mantenerse ahí, está estupendo. Principio de la silenciación: “acallar sobre las cuestiones sobre las que no se tienen argumentos y disimular las noticias que favorecen al adversario, también contraprogramando con la ayuda de medios de comunicación afines”.
Por eso no me canso de hablar sobre lo bien que íbamos.
-Ahhh, a eso lo llame “principio de la transfusión”, por regla general la propaganda opera siempre a partir de un sustrato preexistente, ya sea una mitología nacional o un complejo de odios y prejuicios tradicionales; se trata de difundir argumentos que puedan arraigar en actitudes primitivas. ¿Si me capta?
Completamente
-Siga también usando mi “principio de la unanimidad”. Llegar a convencer a mucha gente de que piensa “como todo el mundo”, creando una falsa impresión de unanimidad.
Me gusta la idea, pero ¿cuánto aguanta esta magia?
-Mientras usted siga inventándose enemigos y generando odio, seguirá manteniéndose así.
Pero ya cayó la URSS, la Alemania Oriental, Correa en Ecuador, Evo en Bolivia, el castrismo está cada vez más debilitado, Lula en Brasil, Daniel Ortega ya tiene más detractores.
-Bueno, bueno, la URSS duró 71 año, el PRI el mismo tiempo, el Castrismo tiene más de 60 años ¿cuánto quiere durar usted?
Pues lo necesario para consolidar la 4T.
-No amigo, sea realista, ninguno de los regímenes mencionados alcanzó su fin. El PRI quería la justicia social y ¿cómo anda México en eso? Lo malo son los personajes que lo acompañan y usted está rodeado de la misma mano de obra.
Pero mi gente es honesta.
-Mmmmm, no lo creo. Mire, nosotros logramos en poco tiempo ensalzar hasta el delirio los valores del Partido Nacionalsocialista Obrero. La información que difundíamos se basaba en el desprestigio, la falsedad y la distorsión, logrando introducir nuestra filosofía en la mayoría de la población. Lo único que nos detuvo fue la derrota de la guerra. Pelear con el enemigo equivocado.
Hace tiempo platiqué con sus camaradas y me criticaron la forma de hacer las cosas.
-Entienda una cosa, el gobierno no genera riqueza, no estrangule a quien la genere. Su homólogo uruguayo lo señaló: “no puedes desaparecer a quien genera plata”.
Pero no quieren pagar impuestos y actúan en mi contra.
-Solo no los humille, no los lleve a su terreno. Recuerde lo que le ha enseñado Maquiavelo, que los hombres olvidan más pronto la muerte de su padre que la pérdida de su patrimonio.
-Ya me tengo que ir porque mi jefe me espera.
Muchas gracias, señor gobels, fue muy productiva esta plática con usted. Salúdeme a Adolfo y a Vladimir si los ve.
-Si claro, competimos círculo, lo esperamos y quizá pronto generemos una charla con mi Führer.
Palacio es su casa. Y hasta la Victoria siempre.
-Jajajaja, también veo seguido a Ernesto, espero y también platique pronto con él.
Al despertar ya están los reporteros acomodándose en sus lugares esperando las maromas del circo y a su dueño listo para anunciarlas.